1972
-¿Dónde
vamos, abuelo?
-Voy a
darte tu regalo de cumpleaños.
-¿Y qué
es abuelo? ¿Una bici? ¿Un balón de
fútbol? Dime qué es abuelo, dímelo –repetía Marcos impaciente.
-Vamos al
cine, Marcos. Por primera vez entrarás en un cine.
-¿Al
cine? – contestó Marcos lloriqueando. –Yo no quiero ir al cine. ¡Abuelooooo, eso
no es un regalo! Eso no puedo enseñárselo a mis amigos. ¡No quiero tu
regalo!
Marcos era
feliz con su abuelo; pero como niño, no entendía por qué su abuelo le hacía regalos
tan raros y que a él lo enfadaban tanto. No sabía -porque aún no podía saber-, que
cada rabieta era el ascua que un día avivaría cada una de las pasiones de su
vida.
2004
-¿Dónde
vamos papá?
-Vamos a
por tu regalo de cumpleaños.
-¿Y qué
es papá? ¿Una bici? ¿Un balón de futbol?
-Vamos al
cine, hijo. Por primera vez entrarás en un cine.
Mari
Carmen Diago Egaña
Otro bonito relato, Carmen. Cuanto materialismo.......
ResponderEliminarGracias otra vez Falotito.
ResponderEliminarHe querido reflejar en este relato estos regalos de la vida que solo podemos apreciar con el paso del tiempo. Como tantas cosas, personas, oportunidades... que necesitan tiempo para posarse pero que cuando lo hacen y las comprendemos solo podemos estimarlas como un regalo. ¡Cuántas cosas! ¿verdad? Ese es el aprendizaje. Gracias por tu comentario. ¡Feliz día!
Hola Srta. Carmen. Efectivamente, eso es parte del adiestramiento q nos hace pasar de un carácter en bruto a ser una persona formada en sus propias convicciones con la ayuda de las esperiencías adquiridas a través de nuestros mayores.
ResponderEliminarUn saludo Srta. Carmen.
jajajajja, sí, Falotito.
ResponderEliminarPero yo eliminaría eso de "a través de nuestros mayores. A veces si,a veces no. No toda experiencia, ni siquiera las más válidas o ejemplares nos llegan a través de nuestros mayores. La experiencia es intransible. Aunque cierto, que el entorno durante una época importante de nuestra vida, marca. deja huella.
Un placer tus comentarios, Falotito. UN placer
Hola de nuevo Srta Carmen. Puedo tutearla? Cuando hago referencia a "nuestros mayores" me refiero al entorno de un niño que siempre se nutrira de lo que capte de los mayores, no ancianos, no, niños con otras vivencias (y en los tiempos que corren probeblemente con otra cultura), que tienen mas edad y por tanto mas experiencia.
ResponderEliminarUn saludo de nuevo.
Agradezco la puntualización Falotito.
ResponderEliminarUna vez más ¡Gracias!
Brillante Carmen, como siempre. Vivencias, experiencias....esos momentos que no se olvidan y te acampañan a lo largo de la vida.
ResponderEliminarMila.
Así es; esas vivencias, que con el tiempo pasan a ser recuerdos, siempre nos acompañan, nos arropan, nos arrancan una sonrisa y nos hacen sentir la calidez y el privilegio de haberlos vivido.
EliminarGracias Mila por leernos y por tu comentario.
Un placer!
Brillante Carmen, como siempre. Vivencias, experiencias....esos momentos que no se olvidan y te acampañan a lo largo de la vida.
ResponderEliminarMila.
Ójala como en tu historia loa adultos dedicaramos más tiempo a los peques en enseñales otras actividades alternativas a las maquinitas...
ResponderEliminarBueno, aquí me descubro ante tu comentario;pero qué razón tienes Carmen.
ResponderEliminarLa pena es que esto ya no es una batalla familiar -por decirlo así-. Es una
batalla a corazón abierto contra toda la sociedad.
Gracias Carmen. Un placer
Los abuelos nos dejan recuerdos tan bonitos!!!!, yo tengo 60 anís y aún recuerdo a mi abuelo cuando cada día le acompañaba calentando ka gloria y sigo diciendo las frases q nos decía mi abuela. Qué suerte haber podido disfrutar de ellos. Gracias Carmen x hacer q los recordemos
ResponderEliminarLos abuelos nos dejan recuerdos tan bonitos!!!!, yo tengo 60 anís y aún recuerdo a mi abuelo cuando cada día le acompañaba calentando ka gloria y sigo diciendo las frases q nos decía mi abuela. Qué suerte haber podido disfrutar de ellos. Gracias Carmen x hacer q los recordemos
ResponderEliminarBuenas noches Merche.
ResponderEliminarYo también he tenido la fortuna de tener a mis abuelos muchos, muchos años. Y lo que más me enorgullece y satisface es que supe disfrutarlos. Y ellos supieron disfrutar de su nieta más escandalosa. jajajajajajja.
Gracias Merche por la ternura de tu comentario.
Un placer
Carmen Diago
carmeen quisiera hablar contigo como contacto
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